Ya estoy aquí. Viajar en el tren tiene una gran ventaja con respecto a viajar en coche: puedes ver películas. No voy a contaros que en Gijón me hizo un tiempo relativamente bueno, que me he hinchado a comer (bien), que he asistido a algunas actuaciones de música popular que incluso me han gustado... Nada de eso, que no es cuestión de ir creando envidias. Os voy a comentar brevemente las películas que, además, he podido ver durante el fin de semana.
Hacia allá pusieron en el tren El hombre del año, una comedia simpática y poco más, pero que se traga fácilmente y me hizo el viaje algo más corto. De ella, me quedo con una frase que suelta Cristopher Walken: "La única diferencia entre la ficción y la realidad es que la ficción tiene que resultar creíble".
En la noche del domingo, para reposar de tanta salida y tanta comida, vimos The Prestige. El truco final, sin reventar la película, sólo diré que me gustó cómo está hecha, la estructura con flash backs dentro de los flash backs, los diarios y todo eso, pero que el final se carga todo eso y te hace decir: ¡¡vaya tomadura de pelo!!
A la vuelta en el tren pusieron una película de perros en la nieve durante la que preferí ir leyendo, y después, Encontrando Neverland. De ésta me gustó mucho todo el juego de ficción y realidad (de nuevo), de cómo la ficción impregna nuestra existencia y nos ayuda a sobrellevarla, de qué es el proceso creativo, de los miedos del creador ante su público, y me gustó algo menos el almíbar que destilaba todo. Pero también se ve con agrado y llegué a emocionarme el algún momento. Me pilló predispuesto.
Así que eso es lo que os cuento de mi viaje a Gijón.
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5 comentarios:
...Y por lo que veo nos ponen la misma película en el tren de regreso de Gijón, que yo también vi "El hombre del año" (extraña película con mucha gente que me ayudó a soportar a Robin Willians. Laura Linney es la actriz que nunca está mal), y también vi una horrible de Susan Sarandon en sus horas bajas llamada "Irresistible", que hacía honor a su nombre.
Por lo que veo tú disfrutaste de la fiesta de la sidra, que empezaba justo cuando yo volvía.
Bienvenido a la vorágine matritense, Antonio. Y ya falta menos para la vuelta de "Hospital Central", digo yo ¿no?
En mi último viaje a Madrid nos colocaron el bodrio "Devuélveme mi suerte". Era tan mala que podía seguirse y entenderse sin llevar los auriculares.
A mi el final de "the Prestige" me disgustó tanto que tuve que impregnar de ficción la realidad para poder sobrellevarlo. No lo explico que tiene demasiado espoiler.
Vayas vacaciones te has pegado, no? Un saludo.
Parece que la programación es la misma, porque después de El hombre del año, también pusieron Irresistible en mi tren, pero yo preferí leer y ver un capítulo de CSI (es que llevaba un MP4 y me podía permitir ese lujo). Sobre el inicio de Hospital Central, parece que sí, pero yo sé de fechas tanto como tú, te lo prometo.
Ruth, a mí en un viaje a Córdoba también me pusieron Devuélveme mi suerte y tuve que quitarla a los pocos minutos.
Y hermosocul..., digo Sobreunanube, a mí me pasó algo parecido, no me podía creer que ese final obvio pero imposible iba a ser realmente el final (a Guillermo-Casiopea la película le encanta, pero no consigue convencerme de que ese final es bueno).
Dios mío, soy una paleta multimedia, no sé ni lo que es un mp4, supongo que algo más allá que un mp3 desde luego, ya que te permite ver video y todo.
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