Aparcar resultó fácil, lo que es de agradecer (el recuerdo de mi último Festimad es alargado).
Había comprado el "festipack", que era una entrada en la que se incluía un vale para una camiseta. En fin... quien lo haya comprado estará de acuerdo conmigo: para esa camiseta roñosa, mejor que no den nada. Pero bueno, es la típica que acabará como "camiseta de dormir".
Con tanto calor, las primeras cervezas casi se evaporaban en las manos mientras tomábamos contacto escuchando apenas un par de temas de The Hours y de How I became the bomb. Y entonces, temprano pero con ganas, nos acercamos a ver a The Sunday Drivers. Ellos mismos se quejaron del horario que le habían puesto, pero era lo que había. No es la primera vez que los veo en un festival, y volvieron a gustarme. Aquí va lo que grabé de ellos.
Después tocaba hidratarse más y un vistazo a las tiendas de merchandising antes de volver al mismo escenario a disfrutar de un grupo que también había visto antes (en el FIB y en la Riviera): James. De nuevo a pasarlo bien. Impagable la forma de bailar del cantante.
Pulp era un grupo que me gusta bastante, pero el disco de Jarvis Cocker apenas lo he escuchado y tenía la sensación de que el concierto iba a ser aburrido. No cantó nada de Pulp, y aunque me hubiera gustado, entiendo que quiera hacerse un sitio con su nombre. La cosa estuvo colorida y más animada de lo que esperaba. Os pongo aquí un trocito.
A ver si me atienden, me como el bocata, y sigo en otro momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario