
Es como si te dejan vender coches, pero no puedes hacer ofertas para venderlos. Y los coches también matan.
Aclaro que no soy culpable de verme afectado por esta ley porque empiezo a tener una edad en que los ardores pueden más que los alcoholes, y hace mucho tiempo que prefiero una copa larga y de buena calidad, a dos rápidas y de garrafón. Pero eso no quita para que no entienda nada.
Si la cosa la hacen porque el alcohol es malo para la salud, ¿por qué permiten venderlo? Nadie entendería una ley que permitiera vender veneno para el consumo humano, pero sólo si no haces ofertas de dos chupitos de cianuro al precio de uno. Y no por la oferta, precisamente.
De todas formas, quien tiene un bar suele tener también ingenio. Ya se buscarán la forma se seguir haciendo ofertas sin vulnerar la ley. Tiempo al tiempo.
1 comentario:
Los vendedores de cerveza callejeros se estarán frotando las latas, como versiones humildes de Al Capone durante la Ley Seca.
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