Apitiké

Apitiké
Nuevo servicio para escritores

martes, julio 17, 2007

La conquista de Boadilla (Tercera parte)

El segundo día lo decidimos tomar con más calma. Reconocido el terreno, no había por qué llegar antes que los músicos. Tras una reparadora siesta, hicimos acto de aparición a eso de las siete y media muy largas. Lo primero, la recogida de tickets. Por cierto, ése es otro tema: ¿Por qué te cobran tres euros por una caña de cerveza en vaso de plástico? ¿Y doce por un cubata también en plástico? ¿Y por qué a la gente que entra con botellas de agua le obligan a quitar el tapón para que no la utilicen de arma arrojadiza si el suelo está lleno de piedras como puños? ¿Y por qué dentro pides una botella de agua y el primer día te la daban con tapón? Para todo esto habrá que llamar a Iker Jiménez, pero sigamos con lo que estábamos, la música.

El segundo día se presentaba a priori (para mí) menos interesante que el primero porque conocía a menos grupos. El primero que fuimos a ver eran, de hecho, unos auténticos desconocidos para mí: Editors. Y volví a recordar uno de los motivos de por qué me gustan los festivales, porque descubro artistas. Editors no es que hagan nada nuevo, pero lo que hicieron me gustó mucho, me encantó su concierto y ya me he hecho con algo de música suya.


Como Lily Allen no nos llamaba demasiado la atención, nos acercamos a la terminal S a ver a otro grupo desconocido: Guillemots. Estos me sorprendieron y sí ofrecieron algo diferente. De hecho, tanto mi primo como yo llegamos a pensar: "este es un grupo para comprarse discos, no para bajarlos". De nuevo un festival me hacía descubrir un grupo, dos en el mismo día.


Tras Guillemots aún dio tiempo de escuchar un par de canciones de Lily Allen y acercarnos al escenario grande antes de que empezara otro grupo desconocido (para mí). Como había poca gente, decidimos pillar un buen sitio sobre la alfombra azul cercana al escenario. Al menos con ella se amortiguaban algo las piedras del terreno.
Poco después empezó el concierto. Eran unos franceses llamados Phoenix. Yo pensaba que ya estos no iban a gustarme. Tres descubrimientos en un día serían demasiado. Y me equivoqué. Probablemente es uno de esos grupos en los que no me hubiera fijado si escucho sus canciones en la radio, pero en directo, volví a pasármelo bien. Mira tú por donde, me lo estaba pasando en grande con grupos de los que no tenia ni idea.


Y aún quedaba mucha noche.

3 comentarios:

Josep Joan Bertran dijo...

Sí claro los Phoenix, ¿no es el cantante el novio de Sofía Coppola?

Pasaba por aquí a ver que te contabas del Summercase y... uau 3 posts! ¿Y Arcade Fire, los viste? Graaandes.

Anónimo dijo...

que tal Arcade Fire??

nos puedes contar algo al respecto, Antonio?
O quien quiera... es que me han hablado muy bien de ellos y quisiera saber vuestra opinion.
Besos desde Barcelona

Zero Neuronas dijo...

Mañana hablo de Arcade Fire, pero me temo que no excesivamente bien.
Saludos.